Primero se pensó que los niños necesitaban ir a la escuela en el inicio de la era industrial porque los padres trabajaban y era necesario preparar más obreros para el progreso. Los burgueses eran preparados en casa y los obreros en escuelas. La preparación por clase era distinta –como lo sigue siendo hoy aunque muchos lo nieguen-. Después la escuela fue tomando terreno y popularidad y le hizo creer a los padres que no eran capaces de preparar bien a sus hijos. Se requería de maestros especializados. Estos maestros se convirtieron en “sabelotodo”; consejeros, lideres y académicos, todo al mismo tiempo. Los padres comenzaron a ceder sus derechos de padres, seguros de estar haciendo lo mejor por sus hijos.
Hoy la situación es diferente. Los maestros dejaron de ser personas especiales para pasar a ser solo empleados. Los padres siguen cediendo su autoridad, dirección y disciplina a los maestros porque ahora de verdad no saben como hacerlo. Los niños y jóvenes se encuentran en el limbo, esperando a seguir un liderazgo cada vez mas ausente y congruente, sin dirección ni propósito mas allá de ganar dinero y subyugar o mejorar económicamente siendo subyugado.
Hoy la niñez se ha prolongado en una adolescencia interminable porque la escuela nos ha hecho sentir que no somos adultos hasta terminarla.
Hemos hecho de un titulo universitario el máximo logro de una vida y de un deportista el modelo a seguir.
La escuela te enseña a que todo debe medirse: el conocimiento, la imaginación, el valor de una persona…
Nos han enseñado la necesidad de ser enseñados.
En una encuesta llamada My Worl 2015 se reveló que los jóvenes a nivel mundial consideran que “una educación mejor”, una “atención médica mejor” y “un gobierno honrado y receptivo” son los aspectos que marcarían una mayor diferencia en sus vidas. ¡Wow!
¿Sabias que en estos momentos hay mas jóvenes de entre 10 y 24 años que nunca antes en la historia de la humanidad? ¡Lo que me doy cuenta es que nuestro planeta hoy está mas lleno de jóvenes que nunca! Son un montón de jóvenes repartidos en todo el mundo que están gritando: “¡Hey, alguien que ayude por favor!
Estas 3 grandes exigencias de la juventud pueden ser resueltas desde casa:
Una educación mejor: ¿En realidad que quiere decir una educación mejor? Pues creo que eso depende de quien lo diga. Una educación mejor para alguien que vive en la sierra de Chihuahua no creo que signifique lo mismo para alguien que vive en el D.F. Creo que todos tenemos derecho de aprender lo que necesitamos aprender. Educación en casa abre una grandiosa perspectiva para esto. El aprendizaje se convierte en algo aplicable desde el primer momento. Es una herramienta de construcción y no un fin. De acuerdo a algunas estadísticas de los Estados Unidos (usamos éstas porque en México no existen), la educación en casa es la forma mas rápida de aprender que tienen en ese país. El 87% de todos los estudiantes sacaron menos calificación en los exámenes estandarizados que los educados en casa. ¡Eso es muchísima diferencia!. En universidades famosas como Harvad, los jóvenes que fueron educados en casa tienen preferencia para entrar y se les hacen exámenes de admisión distintos…¡Creo que en nuestro contexto eso es una educación mejor!
Atención medica mejor: En el 2013, México destinó 6,200 millones de pesos en infraestructura de salud. Hoy hay más médicos, más hospitales, más unidades móviles, más instrumentos de diagnóstico… pero también hay más enfermos. ¿Te has dado cuenta que los niños que no van a la escuela tienen menos enfermedades contagiosas, duermen mejor, comen mejor, hacen buen ejercicio, necesitan menos o ninguna vacuna y por lo tanto ¡Están más sanos!?. No necesitamos más médicos u hospitales, necesitamos más salud. La creciente población enferma del mundo necesita tener acceso a mejores alimentos y condiciones de vida. En casa tu tienes control de todo esto. Es la manera ideal de crecer.
Gobierno honrado y receptivo: El liderazgo fallido de hoy es resultado de la falta de estructura interna. Ésta cadena de maldad y falta de integridad se debe romper en esta generación. Nosotros, los padres, somos una generación de rompimiento. Mientras más padres se hagan responsables de sus hijos, estaremos enseñando éste mismo tipo de liderazgo a los nuestros. Como familia pueden involucrarse en servicios públicos útiles, impacto social real, proyectos de ayuda comunitaria que funcionan de verdad porque están vistos desde la perspectiva correcta de la familia y no desde el punto de vista demagógico queriendo solamente aumentar cifras en un informe. El liderazgo congruente y eficaz nace en casa.
¡Nunca antes hubo 1,800 millones de jóvenes vivos en el planeta!
… ¡Yo me voy a hacer cargo de los míos!
Fuentes:
http://www.cnnexpansion.com/economia/2013/07/20/pena-nieto-anuncia-inversion-en-salud
http://www.topmastersineducation.com/homeschooled/
http://www.unfpa.org.ni/wp-content/uploads/2014/11/SWOP2014-Report-Web-Spanish.pdf
Buenísima reflexión Cecy. Está en casa la solución a los problemas sociales y empieza cuando nos hacemos cargo de nuestros hijos dando la educación que los entrene para la vida, haciendo de ellos mejores ciudadanos.
Espero que realmente sea útil.